El sujeto depresivo-narcisista no es capaz de ninguna conclusión. Y sin conclusión todo se derrama y se esfuma. Así, este sujeto no tiene ninguna imagen estable de sí mismo, que es también una forma de conclusión. No es casual que los síntomas de la depresión incluyan la indecisión, la incapacidad de resolución. La depresión es característica de un tiempo en el que, por el exceso de abrir y deslimitar, se ha perdido la capacidad de cerrar, de concluir. Desaprendemos el morir, porque no somos capaces de concluir la vida. También el sujeto del rendimiento es incapaz de cierre, de conclusión. Se rompe bajo la coacción de tener que producir cada vez más.

Pues en lugar alguno se ve un inmortal ya en el cielo…

Hölderlin.

Los ciclos sin fin de la idea y la acción, inversión sin fin, experimento sin fin, traen conocimiento del movimiento, pero no de la quietud; conocimiento de la palabra, pero no del silencio; conocimiento de las palabras, e ignorancia de la palabra.

Todo nuestro conocimiento nos trae más cerca a nuestra ignorancia, toda nuestra ignorancia nos acerca a la muerte, pero cercanía a la muerte no más cerca de dios.

¿Dónde está la vida que perdimos viviendo?

¿Dónde está la sabiduría que hemos perdido en el conocimiento?

¿Dónde está la sabiduría que hemos perdido en la información?

Los ciclos del cielo en veinte siglos nos traen más lejos de dios y más cerca del Polvo.

Saul Steinberg. Nose Mask. silver gelatin print, 15½ x 15¼. Photo by Irving Penn. New York, 1966

Se dice que Leonardo da Vinci hizo la siguiente observación sobre un retrato encubierto: <<Non scoprire se libertá t´è cara ché il volto mio è carcere d´amore>> (No descubras si tienes en alta estima la libertad, pues mi rostro es la cárcel del amor). Esta sentencia expresa una experiencia especial del rostro que hoy, en la época de Facebook, ya no es posible. La cara, que se expone y solicita la atención, no es ningún semblante. En ella no mora ninguna mirada. La intencionalidad de la exposición destruye toda interioridad, aquella reserva que constituye la mirada: <<Él no mira nada: retiene hacia adentro su amor y su miedo: la Mirada es esto>>. La cara expuesta no es ningún semblante que esté enfrente, que me atrae a su cauce y me encadena. Así, la cárcel del amor cede el puesto a la caverna de la libertad.

La progresiva positivización de la sociedad mitiga, asimismo, sentimientos como el miedo o la tristeza, que se basan en una negatividad, es decir, que son sentimientos negativos. Si el pensamiento mismo fuera una red de anticuerpos y de defensa inmunológica natural, entonces la ausencia de negatividad transformaría el pensamiento en un ejercicio de cálculo. Quizás el ordenador hace cálculos de manera más rápida que el cerebro humano y admite sin rechazo alguno gran cantidad de datos porque se halla libre de toda otredad. Es una máquina positiva. Precisamente por su egocentrismo autista, por su carencia de negatividad, el idiot savant obtiene resultados solo realizables por una calculadora. En el marco de la positivización general del mundo, tanto el ser humano como la sociedad se transforman en una máquina de rendimiento autista. También puede decirse que justamente el esfuerzo exagerado por maximizar el rendimiento elimina la negatividad porque esta ralentiza el proceso de aceleración. Si el ser humano fuese un ser de negatividad, la total positivización del mundo tendría un efecto no inofensivo. Según Hegel, precisamente la negatividad mantiene la existencia llena de vida.